Empecemos con un para siempre.

Empecemos el día con unos cuantos besos, de esos que te elevan a las estrellas, de esos que no te hacen falta soñar porque ya los tienes. Sigamos con unos te quiero y con unos abrazos que nos dejen en estado de shok. Esos grandes detalles que tienes conmigo, esos sueños que me haces realidad. Continuemos con esos susurros de las típicas frases "Sin ti me muero" "Te necesito". Durmamonos deseándonos como nunca y al día siguiente, no quiero que sea un día cualquiera, quiero... ¡que empecemos con un para siempre!